El paisaje de Potrerillos, emblema natural de Mendoza, fue escenario de un acto de vandalismo que generó indignación en redes y medios de todo el país. Un grupo de turistas oriundos de Buenos Aires fue filmado mientras pintaba sus nombres con aerosol sobre las rocas del lugar. Las imágenes se viralizaron y activaron una causa judicial por daño ambiental.

Mientras la Justicia avanza en la identificación de los responsables -que podrían enfrentar sanciones económicas millonarias según el Código Contravencional-, la respuesta ciudadana no tardó en llegar. Este viernes, durante el feriado por el Santo Patrono Santiago, un grupo de colaboradores liderado por la vicegobernadora Hebe Casado y representantes del Ministerio de Ambiente subió a la zona afectada y limpió las rocas vandalizadas.

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Desde la señal aclararon que no hubo heridos y que se trató de un cortocircuito.

"Vinimos a limpiar el recuerdo que nos dejaron algunos visitantes. No es una práctica frecuente, pero lamentablemente se repite en muchos puntos turísticos de Mendoza", expresó Casado, quien había pedido públicamente que los autores del daño regresaran a reparar lo que hicieron.

La acción se enmarca en una campaña de concientización sobre el cuidado del entorno natural y la responsabilidad individual en espacios compartidos. Desde el Gobierno provincial confirmaron que seguirán trabajando junto a organizaciones ambientales para preservar los destinos turísticos mendocinos.

El caso, que involucra a adultos mayores que dejaron inscripciones como "Stela, Grachu, Gui, Mari y Moni", se convirtió en símbolo de una problemática recurrente: el deterioro del patrimonio natural por parte de visitantes que desconocen -o ignoran- las normas de conservación