Esta mañana en Radio El Observador Mendoza se comunicaron con Orlando Bazán, analista geopolítico internacional para detallar hacer un pequeño informe sobre la historia de este conflicto en Medio Oriente.

Orlando comenzó detallando que para poder entender bien este conflicto "tenemos que subirnos a la máquina del tiempo y volver hacia la posguerra de la Primera Guerra Mundial que, cuando se reconfigura el Imperio Otomano, se divide en varios países sin tener en cuenta el origen de esos clanes, las tribus que habitaban el lugar. Mezclando en un mismo espacio a enemigos e inclusive con el protoestado de Israel creado en ese momento, lo cual se potencia después de la Segunda Guerra Mundial".

Los vencedores no aprendieron la lección del conflicto que ya había post Primera Guerra Mundial y "dotan al Estado de Israel de mayor población, recordar que muchos de los sobrevivientes del Holocausto fueron derivados a esa zona" subrayó.

Es por eso que meten un tercer enemigo que en un principio los une, recordemos las guerras independentistas de Israel que fueron contra todos los estados limítrofes y no limítrofes, pero que pertenecían al elegido de los países árabes.

Pero, con el pasar del tiempo este conflicto se reconfigura con estados que no poseen un territorio, o sea, no eran un país propiamente dicho, sino que se conformaban desde una ideología basada en la religión: "esto hace que sea transversal".

"Como todo grupo es piramidal Hamás al perder su cúpula de liderazgo inclusive su propio líder se configura una guerra de poder. Ese poder lo vamos a demostrar con agresiones".

"Yo no hablo tanto de nombres, sino te hablo más bien de voluntades. Este es un conflicto que nació allá en 1918 con el final de la Primera Guerra Mundial han pasado 100 años, no ha cambiado nada, ha cambiado la frontera, los nombres, pero el conflicto sigue siendo el mismo".

Esta onda expansiva llega más allá del océano porque, en la administración de Joe Biden se quiso intervenir en un momento para poder tranquilizar la zona y sentar a todos en una mesa de paz para que se termine este conflicto. Hay muchos intereses, están los países petroleros que te pueden subir el precio del petróleo y que va a concluir en un conflicto económico dentro de tu país.

"Esta toma de posición de Biden buscando interceder entre las partes para la paz inclusive ha sido tomada como una especie de traición por parte de Israel con lo cual, la injerencia externa que puede haber en el conflicto ya hoy en día es nula directamente" explicó el analista.

"El problema aquí es que hay dos líderes, el líder de Hamás, y al líder israelí que está haciendo una demostración de poder para limpiar la zona, pero sin mirar mucho lo que los daños que está causando hacia poblaciones civiles. Porque en una situación imaginaria en la que se diera la paz, hay que reconstruir toda esa zona. Hay epidemias que se están potenciando en estos momentos por las condiciones de vida" agregó Orlando.

"Por ejemplo, si sos una madre palestina que te mataron a tu marido y a y tus hijos, no creo que estés muy contenta de tener vecinos israelitas, que es lo que les va a pasar".