La noticia fue confirmada por sus hijos, Chris Larkin y Toby Stephens, en un conmovedor comunicado. En él, expresaron su gratitud hacia el personal médico y solicitaron respeto por la privacidad de la familia durante este difícil momento.

Smith deja un legado imborrable en el mundo del entretenimiento, una huella que perdurará a través de sus memorables personajes.

Su vida estuvo marcada por la brillantez y el talento, elementos que la convirtieron en una figura insigne de la actuación en Gran Bretaña y más allá. Su carácter reservado y su dedicación al arte le otorgaron un lugar especial en los corazones de quienes la admiraban, haciendo que su legado sea aún más impactante.

Un trayecto profesional excepcional

Dame Margaret Natalie Smith, nacida el 28 de diciembre de 1934 en Ilford, Inglaterra, comenzó su carrera en el mundo del espectáculo a una edad temprana y, a lo largo de siete décadas, estableció un estándar de excelencia en la actuación. Su recorrido se caracteriza por un compromiso incansable con su oficio, lo que le permitió interpretar una variedad de roles en el cine, el teatro y la televisión.

A lo largo de su carrera, recibió un impresionante número de premios que destacan su talento. Smith fue galardonada con dos premios Óscar: el primero, a la Mejor Actriz por su papel en "La Primavera de una Solterona" en 1969, y el segundo, a la Mejor Actriz de Reparto por "California Suite" en 1978. Además, su talento la hizo merecedora de cinco premios BAFTA, cuatro Emmy, tres Globos de Oro y un Tony, entre otros. Este impresionante palmarés la convirtió en una de las pocas actrices en alcanzar la Triple Corona de Actuación, un logro que resalta su versatilidad y dedicación.

Durante las últimas décadas, su actuación como la profesora Minerva McGonagall en la serie de películas "Harry Potter" atrajo la atención de una nueva generación de espectadores, que se enamoraron de su sabiduría y fuerza. Asimismo, su interpretación de Violet Crawley en "Downton Abbey" le valió reconocimiento internacional y solidificó su estatus como una de las grandes actrices de su tiempo. Su talento trasciende generaciones, y su capacidad para encarnar personajes complejos la convierte en un ícono perdurable en el mundo del entretenimiento.

Un legado que inspira

Maggie Smith fue reconocida no solo por su talento, sino también por su impacto en la industria cinematográfica. En 1990, recibió el honor de ser nombrada Dama Comandante de la Orden del Imperio Británico, un reconocimiento que refleja su contribución a las artes. Desde entonces, muchos la conocían como Dame Maggie Smith, un título que, más allá del honor, simboliza la grandeza de su carrera y su influencia en el mundo del espectáculo.