Fecovita consiguió un avance significativo en su disputa legal contra la firma española Iberte, en el marco de un caso que abarca tanto el ámbito comercial como el penal. Este martes, la jueza Eleonora Arenas, del Primer Tribunal Penal Colegiado, levantó la prohibición que impedía a varios directivos de Fecovita, incluido su presidente Rubén Panella, salir del país. Esta medida había sido impuesta tras ser imputados por la Unidad Fiscal de Delitos Económicos por presuntamente presentar balances falsos.

Además de Panella, otros ejecutivos como Eugenio Portera, Roberto Vázquez, Hilda de Vaieretti, Marcelo Federici y Gustavo Aranguena también estaban sujetos a esta restricción. La Fiscalía, encabezada por Juan Ticheli, había argumentado que estos directivos eran autores o partícipes en la elaboración de un balance contable fraudulento.

La causa judicial que enfrenta a Fecovita e Iberte se remonta a 2022 y gira en torno a un fallido contrato de venta de vino y mosto en Europa, el cual ha desencadenado acusaciones de incumplimiento por más de 30 millones de dólares, además de denuncias de fraude. Las tensiones se intensificaron cuando se realizaron acusaciones sobre cheques de pago diferido que no fueron cobrados y solicitudes de quiebra.

En su resolución, la jueza Arenas consideró que la prohibición impuesta a los directivos de Fecovita era "una medida de coerción simple", y la calificó como "infundada, arbitraria y desproporcionada", destacando que no existía un riesgo de fuga del país. La Unidad Fiscal había imputado a los directivos bajo el artículo 300, inciso 2, del Código Penal, por el delito de "balance falso".

Con el levantamiento de la restricción, la defensa de Fecovita argumentó que la medida había sido "negociada" entre el fiscal Ticheli y la parte demandante, representada por Iberte. Fernando Juri, abogado de la defensa, criticó la decisión del fiscal al considerar el balance contable de 2023 de Fecovita como falso, a pesar de que se había presentado un acta de asamblea de accionistas que no fue debidamente valorada.

A pesar de esta victoria, Fecovita ha señalado que ha perdido millones de dólares en ventas en los últimos meses debido a la situación, ya que Panella había planeado viajar a México, Estados Unidos y Canadá para cerrar importantes contratos de venta de vino y mosto.

El conflicto se originó cuando Fecovita acordó entregar un volumen considerable de vino y mosto a Iberte en un contrato de consignación. Posteriormente, ambas empresas crearon una sociedad llamada Evisa, que ahora también se encuentra en el centro de la disputa. Iberte ha argumentado que, al haber vendido sus acciones en Evisa, busca minimizar su responsabilidad en la relación comercial.

Mientras Fecovita y su defensa se preparan para enfrentar un peritaje contable cuestionado por la parte demandante, el litigio sigue en un tira y afloja entre la intención de Iberte de mantener el caso en el ámbito penal y el deseo de Fecovita de resolverlo en el ámbito comercial. Juri afirmó que "Fecovita no está en estado de cesación de pagos. Este es un tema comercial que debe dirimirse en ese fuero; el contrato está registrado ante el Tribunal Arbitral de la Bolsa de Comercio".

Mientras tanto, el Tribunal Arbitral deberá pronunciarse sobre las reclamaciones de ambas partes.

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Mendoza

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