El presidente expuso por primera vez en la asamblea general del organismo. Pasó de ser una organización que buscaba la paz, a una que quiere imponer como viven todos los ciudadanos del mundo, sostuvo.
El presidente Javier Milei hizo su debut este martes ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) con un encendido discurso que utilizó para criticar la agenda 2030 y para diferenciarse de la organización, que acusó de tomar "un rumbo trágico".
"La ONU pasó de ser una organización que buscaba la paz a una que quiere imponer como viven todos los ciudadanos del mundo, imponiendo una ideología única", comenzó en su duro discurso el mandatario argentino.
"La Agenda 2030 es un programa socialista que pretende atentar a la soberanía de la nación", agregó tajantemente.
En ese sentido, dejó en claro que "en esta casa, que dice defender los derechos humanos, han permitido el ingreso al consejo de DDHH a dictaduras sangrientas como Cuba y Venezuela".
"También permitieron el ingreso al Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer a países que las castigan por mostrar la piel", sostuvo.
En el cierre de su discurso, que duró casi 15 minutos, Milei dejó un mensaje a futuro: "A partir de este día, sepan que la República Argentina va abandonar su posición de neutralidad histórica que nos caracterizó y va a estar a la vanguardia de la lucha en defensa de la libertad"?.
La gira por Estados Unidos
Desde Nueva York, en el marco de un nuevo viaje internacional, el mandatario se encuentra de regreso por sexta vez en Estados Unidos. En un avión privado, ya que el oficial se encuentra en mantenimiento, el libertario partió el sábado por la noche a poco más de un mes de su última salida al exterior, cuando emprendió una visita exprés a Chile.
Está acompañado por el ministro de Economía, Luis Caputo; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; y la canciller, Diana Mondino. Podría sumarse a la delegación el titular del Banco Central, Santiago Bausili.
Con la sede del Fondo Monetario a pocos kilómetros, en Washington, las especulaciones por las renegociación de un nuevo acuerdo resuenan, pese a que fuentes del Ministerio de Economía aseguran que no hay reuniones programadas con funcionarios de la Casa Blanca ni con autoridades del Fondo.
Hasta el momento, las negociaciones con el FMI permanecían estancas, y en el Gobierno atribuían esa quietud al director del Hemisferio Occidental, Rodrigo Valdés, quien optó por correrse del cargo tras los señalamientos del mandatario que lo llamó "??izquierdista"?. Este cambio renovó las expectativas libertarias, que se esperanza con un rediseño del entendimiento.