Politica En la OEA

Por su dura posición ante el fraude en Venezuela, Argentina queda desalineada de Estados Unidos

Por orden del Presidente, la canciller argentina exigirá revisar el conteo con veedores internacionales. Washington solo pide mostrar las actas

Jueves, 1 de Agosto de 2024


En medio de los temores por la escalada de violencia en Venezuela, el Gobierno de Javier Milei quedó descolocado en su postura de máxima dureza ante la OEA junto a otros ocho países porque Estados Unidos que encabeza Joe Biden mantiene un posicionamiento más moderado junto con Brasil de Luiz Inacio Lula Da Silva, algo que causó molestias en la Cancillería.

"Habría que haber ido atrás de la postura de Estados Unidos y no de ataque", confió a iProfesional un diplomático profesional muy cercano a la canciller Diana Mondino, que participa en la Organización de Estados Americanos en Washington de la sesión especial por Venezuela.

Al término del encuentro en la OEA, en un comunicado conjunto, los países firmantes expresaron "profunda preocupación" por la crisis en Venezuela y la "revisión completa de los resultados con la presencia de observadores electorales independientes". Exigieron que "el conteo de votos debe ser transparente y los resultados no deben arrojar dudas", y agregaron: "Nuestros gobiernos solicitarán una reunión urgente del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para emitir una resolución que salvaguarde la voluntad popular, enmarcada en la Carta Democrática y los principios fundamentales de la democracia en nuestra región".

Mondino utilizó sus redes sociales para destacar que la "Argentina no será cómplice del fraude en Venezuela y bajo ninguna circunstancia reconocemos el resultado. Maduro: ABRA LAS ACTAS". El Gobierno, dijo, "condena el fraude del dictador Maduro".

La canciller dijo en declaraciones radiales que "no ha sido tan tranquilo el ambiente. Realmente es muy preocupante cómo se está desarrollando. ¿Qué podemos hacer desde Argentina? Nada. Solamente reclamar con nuestra voz". Más allá de la impotencia, agregó que "también podemos dejar en claro que hay mecanismos institucionales que tienen que respetarse. Estamos trabajando con varios países para que, dentro del marco de la legalidad, dentro del marco de las relaciones internacionales, se encuentre una solución pacífica a algo que notoriamente está viciado".

La Argentina enarbola la postura de desconocer los resultados de las elecciones del domingo último en Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro se arrogó la reelección con la denuncia de fraude de la oposicion y de gran parte de la comunidad internacional.

Maduro aseguró que ganó por el 51,2% de los votos contra el 44%, pero la oposición que lidera Corina Machado y el candidato presidencial Edmundo González Urrutia aseguran que según sus actas triplicaron en votos a Maduro. Biden y Lula acordaron pedirle a Maduro que muestre las actas electorales, que fueron ocultadas por el Palacio Miraflores.

En tanto, Mondino, por orden de Milei, firmó un comunicado con Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, que exigió "la revisión completa de los resultados con la presencia de observadores electorales independientes". Es decir, desconoció el triunfo de Maduro.

El gobierno de Javier Milei lideró esta postura y Maduro ordenó sitiar la embajada y expulsar a su encargado de negocios, Andrés Mangiarotti. Esta mañana envió encapuchados y un vehículo del régimen a amenazar a la embajada, donde la Argentina tiene seis asilados opositores venezolanos cercanos a Corina Machado.

Sugestivamente, el ex ministro de Economía, Sergio Massa, rompió el silencio y se despegó del silencio del kirchnerismo y reclamó esta mañana que Maduro muestre las actas. Precisamente, el presidente del Frente Renovador adoptó la misma postura que Estados Unidos y Brasil.

En el gobierno de Milei se sorprendieron por la moderación de Estados Unidos y Brasil. El Presidente ordenó salir antes que todos con una postura dura convencido de que luego se sumaría Washington. Pero no fue así. El embajador norteamericano en la Argentina, Marc Stanley, estuvo ayer con empresarios argentinos y casi no habló del fraude.
El porqué de la posición moderada de Joe Biden y Lula da Silva

Según confió a iProfesional uno de esos empresarios, Stanley dijo que "Estados Unidos espera que se puedan conocer los resultados oficiales de las elecciones". No habló de fraude, ni de revisar la elección ni de desconocer a Maduro.

En medios diplomáticos y de inteligencia avezados coincidieron en señalar a iProfesional que los Estados Unidos y Brasil tienen varios miles razones (o barriles) como para ir con cautela hacia esta crisis. Venezuela es uno de los principales proveedores de crudo a los Estados Unidos, que lo compra a precios más económicos que a Arabia Saudita por el menor peso en los costos del flete.

En el caso de Lula, es aliado estratégico de Maduro. Siempre se sospechó que el régimen bolivariano financió campañas políticas del Partido de los Trabajadores de Lula. En eso, le caben las mismas generales de la ley que a Cristina Kirchner, que recibió valijas de dólares del régimen del fallecido Hugo Chavez, que se descubrieron el 4 de agosto de 2007 gracias a la inspección de la ex agente policial aeroportuaria María Luján Telpuk al valijero Guido Antonini Wilson. Esas valijas iban a financiar la campaña Cristina 2007.

Por ahora, Cristina Kirchner no se pronunció sobre las elecciones del domingo último, pero podría hacerlo este sabado durante un evento sobre política electoral en América latina, justo en este oportuno momento.

En medio de todo este contexto, hay desconcierto en la Cancillería argentina porque sin Estados Unidos ni Brasil el pronunciamiento de los ocho países para desconocer las elecciones de Venezuela caería en saco roto y Maduro se quedará en el poder reprimiendo y matando opositores. Por ahora, hay una lista de 13 muertos. Un número así en cualquier otro país hubiera sido causa de juicio político.

"Maduro se queda. Van a aumentar los muertos y luego se acabarán las manifestaciones callejeras. Mientras Estados Unidos, si gana Donald Trump, va a negociar licencias para explotar crudo y no permitirá invasión del a Guyana", dijo uno de los laderos de Mondino que considera que la Argentina debió seguir la postura de los Estados Unidos.

"Lula al igual que Cristina no le puede mojar la oreja a Maduro, porque éste le saca todos los muertos del ropero, porque el chavismo financió las campañas de Lula y algo mas tambien del kirchnerismo",
señaló un funcionario argentino. Además, no pasan por alto las sospechas de que el régimen bolivariano se financiaría con el narcotráfico.

En la Cancillería descuentan que si Maduro llegó hasta aquí y ordenó la represión con muertos y amenazó con un baño de sangre no está dispuesto a dejar el poder aunque las Naciones Unidas emita un pronunciamiento unánime. Se escuda también en sus aliados poderosos, la República Popular China, Rusia, la República Islámica de Irán y Cuba.

En algún momento de la crisis se especuló con que el frente militar venezolano podría resquebrajarse a instancias de los Estados Unidos, pero esa posibilidad parece alejarse.

"Había que sumarse a lo que hiciera EE.UU. y Brasil porque ahora solo queda como un pronunciamiento que sirve para la política interna y para ver como evoluciona el dólar", ironizó un diplomático de la vieja guardia de Cancillería.