Si se utiliza con frecuencia, puede ser señal de un patrón de abuso emocional. Aprendé a identificar esta conducta.
Lee también manipulación emocional no siempre se manifiesta con gritos o insultos. A veces, aparece disfrazada de advertencias repetitivas que dejan a la otra persona en un estado de ansiedad, miedo y desequilibrio emocional.
La psicóloga española Gladys Hormigo, especializada en vínculos afectivos, explica que estas amenazas frecuentes "desequilibran la relación y generan una profunda inseguridad".
"Cuando un miembro de la pareja lanza la amenaza de ruptura como método de presión emocional, es importante que la otra persona se detenga y se pregunte: ¿Esto es sano para mí?"
Según Hormigo, estas dinámicas erosionan lentamente la autoestima y muchas veces derivan en un cambio de comportamiento forzado. La persona amenazada empieza a ceder en sus límites para evitar el enojo o la pérdida.
Desde otro enfoque clínico, la psicóloga María Esclapez, también de España, remarca que este patrón aparece cuando el diálogo está bloqueado y el vínculo se sostiene sobre lainestabilidad emocional: "Quien lanza este tipo de frases busca mantener el control mediante el miedo al abandono".
La amenaza constante, lejos de resolver, debilita. Deja huellas en la autovaloración y en la percepción que uno tiene sobre lo que merece.
Como dice Esclapez: "Una relación amorosa no debería ser un campo de batalla donde cada error se paga con el abandono."
Otros consejos para sanar también incluyen: reconstruir la identidad propia, mejorar la autoestima , aprender estrategias de afrontamiento más saludables, establecer y mantener límites sólidos, comprender los efectos de la codependencia en las relaciones y la autoestima.