Economía & Negocios Inflación

La estrategia de Caputo para enfriar los precios y marcarle la cancha a las empresas alimenticias

El Gobierno se focaliza en que la inflación se acerque al 2% este mes. Aumenta la presión sobre los formadores de precios. El pedido del ministro

Domingo, 11 de Mayo de 2025

El ministro de Economía, Luis Caputo, redobló la apuesta por la desaceleración de la inflación al instar directamente a las principales cadenas de supermercados a resistir las presiones de los fabricantes de la canasta básica. La jugada, que tuvo lugar en un encuentro en el Palacio de Hacienda, busca frenar los intentos de las industrias de aplicar aumentos de precios de hasta el 16% en las últimas semanas.


La estrategia del Gobierno, que se basa en la contención del tipo de cambio y la reducción del gasto público, parece estar dando sus primeros frutos. Los relevamientos de precios semanales realizados por consultoras privadas ya reflejan una moderación en la inflación, alimentando las expectativas de que mayo cierre con un Índice de Precios al Consumidor (IPC) cercano al 2%. Eco Go, la consultora dirigida por Marina Dal Poggetto, proyecta un IPC no superior al 2,3% para mayo, aunque no descarta que la tendencia desinflacionaria pueda llevarlo aún más cerca del 2%.


El sector privado se muestra receptivo a la presión oficial. Fabricantes de alimentos reconocen que los aumentos de precios son "moderados" y "consensuados" con los grandes comercios. Incluso, algunas empresas líderes están ofreciendo incentivos a sus clientes para moderar los ajustes de precios, e incluso aplicar rebajas puntuales, si realizan sus pedidos antes de la segunda quincena de mayo.


El contexto económico actual, marcado por una demanda "fría" y la necesidad de evitar especulaciones, juega a favor del Gobierno. La administración Milei ha dejado claro que su prioridad hasta las elecciones de octubre es consolidar la tendencia a la baja de la inflación, un objetivo que se había logrado a fines de 2024, pero que se vio amenazado a principios de este año.


Mientras Caputo se enfoca en los supermercados, las grandes industrias aguardan una señal. A diferencia de lo ocurrido con las cadenas comerciales, Economía no ha convocado a los fabricantes de alimentos, bebidas y otros productos esenciales. Ejecutivos del sector industrial reconocen que aún no han recibido invitaciones del Ministerio, aunque minimizan la situación. La principal preocupación de los industriales reside en la estabilidad del tipo de cambio. Si bien aceptan moderar las subas de precios, advierten que sus listas dependen directamente de la evolución del dólar y de los costos de las materias primas.


En este sentido, la política cambiaria del Gobierno juega un papel crucial. El dólar mayorista experimentó una fuerte caída, retrocediendo un 5,9% en una sola jornada, la mayor desde la salida del cepo. En el mercado informal, el dólar blue también se negoció a la baja, al igual que los dólares financieros CCL y MEP.


El levantamiento del cepo para el público minorista generó una fuerte demanda de dólares, según un informe de Eco Go. Sin embargo, la mayor parte de los dólares adquiridos permanecieron en los bancos, lo que sugiere una mayor confianza en el sistema financiero.


En resumen, el Gobierno busca consolidar la desinflación a través de la presión sobre los supermercados, la contención del tipo de cambio y la búsqueda de una señal de confianza por parte de las industrias. La estrategia, aunque riesgosa, es clave para alcanzar la estabilidad económica y llegar a las elecciones con un panorama más favorable. La gran interrogante es si la estabilidad del tipo de cambio, factor crucial para la ecuación, podrá sostenerse en el tiempo.