En busca de la verdad
En busca de la verdad
Donald Coffel está acusado de haber matado a Suzanne Wormser tras una disputa por drogas. Encontraron el torso de la mujer en una valija abandonada en un cementerio.
Un macabro crimen sacudió a la ciudad de Groton, Connecticut: un hombre mató a golpes a una mujer con un bate de béisbol tras una discusión por drogas,convivió con su cadáver durante una semana y media antes de descuartizarla y abandonar su torso en un cementerio.
Por el crimen detuvieron a Donald Coffel, de 68 años,y la víctima fue identificada como Suzanne Wormser, de 58 años.
El brutal asesinato fue descubierto el 19 de marzo, luego de que un vecino sintiera un olor nauseabundo proveniente de una valija cerca de unos contenedores de basura en el cementerio. Al abrirla, la policía encontró el torso de una mujer, sin cabeza ni extremidades.
La hermana de Wormser, preocupada por no tener noticias de ella desde hace meses, alertó a la policía tras ver un comunicado en Facebook el 11 de abril.
Los detectives acudieron al apartamento de Wormser, ubicado a menos de 300 metros del cementerio, y se toparon con una escena terrorífica: había sangre en las paredes, alfombras y muebles. En una de las habitaciones, encontraron un bate de béisbol con sangre seca y pelos escondido detrás de una estantería.
Coffel, que vivía con Wormser desde noviembre, fue localizado en un hospital donde recibía tratamiento por cáncer de páncreas.
En un tercer interrogatorio, el 23 de abril, el hombre confesó haber matado a Wormser a principios de enero, tras acusarla de robarle cocaína valuada en 200 dólares. "Está bien, lo hice. La golpeé con un maldito bate de beisbol y le reventé la cabeza", les dijo.
Según su relato, la golpeó tres veces en la cabeza con el bate, y luego de convivir con el cuerpo durante varios días, lo descuartizó con una sierra.
El sospechoso "confesó el asesinato, proporcionando detalles que coincidían con la documentación de la escena, así como con la evidencia recopilada por los investigadores", dijo el jefe policial David Burton.
"Suzanne siempre tenía la misma rutina. Siempre hacía lo mismo. Así que cuando dejé de verla por la comunidad, supe que algo andaba mal", dijo uno de sus vecinas, Stephanie Oceane. "Ella era era viuda y no iba a ir a ningún lado", agregó.
La brutalidad del crimen y la falta de información inicial desataron rumores sobre un posible asesino serial en la zona. Sin embargo, la policía desmintió estas especulaciones tras el arresto de Coffel.
Fue durante una audiencia que mantuvo con el llamado Grupo de Amigos de Armenia, que visitan Erevan
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