El exfuncionario fue imputado por el fiscal Eduardo Taiano en una causa iniciada por Elisa Carrió, que pidió su indagatoria; tras el acto formal, podrá presentarse a exponer su descargo
El fiscal Eduardo Taiano, que tiene delegada la causa, fue quien requirió la imputación de Berni y de su entonces colaborador Dario Ruiz, por la falta de conservación del departamento, donde irrumpieron funcionarios, policías, la fiscal Viviana Fein y especialistas forenses. La notificación de Ercolini a Berni no constituye un llamado a indagatoria, sino el aviso de la imputación.
"Se los notifica de la imputación formulada por el fiscal y a partir de ello tienen derecho a presentarse, a formular descargo por escrito en una declaración. Esta es una instancia intermedia que da la posibilidad el Código Procesal (artículos 79 y 273) y se utiliza para casos como este, en el que aún hay que evaluar las posibles responsabilidades. No es un llamado a indagatoria, por ahora, pero supone la posibilidad de hacer un descargo como imputado", explicaron a LA NACION fuentes de la causa.
Carrió sostuvo que Berni quiso "embarrar la cancha" cuando "pisoteó" con sus zapatos el departamento y que su conducta fue deliberada, intencional, para ayudar a quienes cometieron el asesinato y permitir que eludieran la investigación judicial.
Carrió hizo la presentación en esta causa, que se inició años atrás por su propia denuncia. La causa está caratulada "Milani, César Santos Gerardo del Corazón y Otros/denegación de auxilio".
En su presentación, Carrió dijo que "habiendo motivos bastantes para sospechar que han participado en la comisión de delitos de acción pública, venimos a peticionar al señor Fiscal que solicite la declaración indagatoria del exsecretario de Seguridad Sergio Berni, así como la de el exjefe de la Policía Federal, comisario general Román Di Santo, y del exjefe de la Prefectura Luis Heiler".
La exlegisladora sostuvo que "se han reunido elementos más que suficientes para hacer comparecer a los nombrados sin mayores demoras; existiendo a esta altura, elementos de convicción para estimar que existen hechos delictuosos protagonizados por los mismos". Dijo que podrían haber cometido los delitos de abuso de autoridad, violación de deberes de funcionario público y encubrimiento.
La denuncia original de Carrió abarca al exjefe del Estado Mayor General del Ejército César Milani, el exjefe de Gabinete Aníbal Fernández, a Berni,Di Santo, al exjefe de Superintendencia de Interior y Delitos Federales Complejos de la Policía Federal Roque Carlos Luna, al exjefe del Departamento de Custodias de la Policía Federal Ronaldo Fabián Abraham Jonte, a los exjefes de la División Seguridad y Custodia Ministerio Público Fiscal y de la Defensa de la Nación de la Policía Federal Eduardo Soto y Guillermo Fariña, y a los custodios afectados a la custodia de Nisman. También al director Técnico de la empresa "Seguridad Integral Empresaria", Ceferino Serra, y al director de la firma Juan Pablo Toro.
Carrió recordó que Taiano ya imputó a Di Santo, Heiler y Berni. por "las inexplicables irregularidades cometidas en la escena del crimen", que dijo consistieron en "la violación de todas las reglas de procedimiento más elementales, hasta la comisión de numerosos "descuidos" que por su alevosidad, denotan conductas que sobrepasan la negligencia para ubicarse en la intencionalidad".
Taiano habló en esta causa de la inoperancia, la desidia y la indiferencia con que actuaron en el lugar los funcionarios que llegaron al departamento de la Torre Le Parc que "solo permite representarnos un alto grado de incompetencia de su parte". El fiscal insistió en que "no se tomaron los recaudos necesarios para la adecuada preservación de la escena", lo que podría llevar a Taiano a pedir la indagatoria de los imputados. En el procedimiento "hubo un sinfín de irregularidades", señala la denuncia, que se vieron en videos exhibidos por televisión.
El comisario general retirado Di Santo, en ocasión de presentarse en el juzgado, dejó un escrito en el que señaló que ese día acudió al departamento de Nisman siguiendo instrucciones del secretario de seguridad Sergio Berni y Darío Ruiz y que se puso a disposición de la fiscal Viviana Fein, que fue la primer funcionaria judicial que intervino en el caso.
Esta causa se inició por una denuncia de la entonces diputada Lilita Carrió y se investiga si existió una maniobra de encubrimiento para alterar la escena del crimen.
En su escrito, Di Santo acompañó declaraciones del entonces ministro Aníbal Fernández y de la propia fiscal Fein, donde señalaban que no había existido un desmanejo de la escena y que no se había alterado con la intervención de los policías.
El fiscal Taiano consideró, en cambio, "la existencia de concretas y graves irregularidades cometidas por los funcionarios públicos en el departamento donde fue hallado sin vida el fiscal Nisman". Y sostuvo que "esas irregularidades podrían poner en riesgo el descubrimiento completo de la verdad".
"Ahora sabemos con exactitud y sin lugar a dudas que se pasaron por alto evidencias determinantes para la investigación, como por ejemplo la existencia de una tercera vía de acceso al departamento que nadie advirtió durante el procedimiento, o que no se tomó la temperatura del cuerpo ni del baño", dijo el fiscal.
La causa por la muerte de Nisman es considerada por la justicia un homicidio. Está procesado como partícipe el técnico informático Diego Lagomarsino quien le acercó el arma con la que se efectuó el disparo que terminó con la vida de Nisman. Están procesados los excustodios del fiscal.
El fiscal Taiano investiga como hipótesis que la muerte de Nisman se produjo en medio de una guerra de diversos grupos de inteligencia locales que respondían a Cristina Kirchner o a Jaime Stiuso. Al declarar en la causa, Stiuso sugirió que grupos kirchneristas estaban tras el crimen.
El fiscal tomó declaraciones a decenas de agentes de inteligencia por la explosión de llamadas telefónicas registradas entre ellos entre el 18 y 19 de enero de 2015 en una actividad intensa, atípica para un fin de semana.
Además investiga un virus introducido en el teléfono del fiscal, donde hay dos colaboradores de la SIDE, exfuncionarios de Entre Ríos, acusados de realizar esa tarea.
En esta causa paralela se investiga si se alteró la escena del crimen, donde están imputados los jefes policiales, al propio Serio Berni y la fiscal Viviana Fein, entre otros.