La linaza o las semillas de lino, que son las semillas de la planta Linum usitatissimum. La linaza es beneficiosa para la salud, ya que es rica en fibra y ácidos grasos omega-3, así como en fitoquímicos llamados lignanos.

Una cucharada (7 gramos) de linaza molida o semillas de lino contiene 2 gramos de ácidos grasos poliinsaturados (incluye los omega-3), 2 gramos de fibra dietética y 37 calorías. Generalmente, se usan para mejorar la salud digestiva o aliviar el estreñimiento. Aunque también tienen otros beneficios:

– Tienen propiedades anticancerígenas

– Ayudan a reducir los niveles de colesterol

– Colaboran a reducir la presión arterial

– Ayudan a controlar el peso

– Contribuyen a la salud del sistema nervioso

– Ayudan a controlar el azúcar en sangre

La mayoría de los expertos en nutrición recomiendan comer linaza molida en vez de linaza entera ya que es más fácil de digerir. La entera puede pasar por el intestino sin digerirse, lo cual significa que no aprovecharás todos los beneficios.

Los intestinos no pueden descomponer la dura capa exterior de las semillas enteras. Se pueden moler en casa usando un molinillo de café o un procesador de alimentos y pueden conservarse en la heladera o en un lugar fresco, oscuro y seco durante 12 meses. Cuando la semilla de lino o el aceite huelen a rancio, no se debe ingerir.

Algunas ideas para incluir las semillas de lino en tu dieta:

– Agregá una cucharada de linaza molida al cereal caliente o frío del desayuno.

– Poné una cucharadita de linaza molida a la mayonesa o mostaza cuando hagas un sándwich.

– Añadí una cucharada de linaza molida a un envase de yogur de 200 cm3.

– Añadí linaza molida a tus galletas dulces, magdalenas, panes y otros productos horneados.

– Otra idea es combinar la linaza molida con un poco de agua para que sea un sustituto del huevo o incorporarla en la carne o en las empanadas de verduras. Podés comprar linaza (entera o molida) en tiendas de comestibles y de alimentos naturales.

La linaza debe ingerirse con mucha agua u otros líquidos. No se debe consumir semillas de lino al mismo tiempo que los medicamentos orales. Hay sospechas sobre la seguridad de tomar grandes cantidades de semillas (sobre las cuatro cucharadas) durante el embarazo, por lo que es mejor consultar al médico antes de probar cualquier suplemento alimentario.