Curiosidades Para observar

Qué son los puntos rojos en la piel y por qué pueden aparecer

Las posibles causas de estas lesiones cutáneas

Viernes, 8 de Julio de 2022

Los puntos rojos de la piel son unas marcas que aparecen en la cara y en el tronco generalmente, a veces en las extremidades, de color rojo o morado. También conocidos como microangiomas, angiomas, angiomas seniles, angiomas capilares o puntos de Campbell–De Morgan, se pueden describir como dilataciones de pequeños capilares.

Muchos presentan puntos rojos o de color rubí en su piel, de pequeño tamaño, unos 2 mm de diámetro, aunque pueden alcanzar hasta 7 o más milímetros. Las protuberancias pueden ser elevadas o planas y aunque normalmente las encontramos en el torso, también pueden desarrollarse en brazos, piernas y cuero cabelludo.

Son benignos y la mayor parte de ellos desaparecen solos, aunque siempre es recomendable acudir al médico para que sea él quien diagnostique si se trata de otro tipo de lesión o de un angioma. En general el pronóstico es muy bueno y lo único que pueden producir es una alteración de la estética, sin influencias sobre la salud.

Si aparecen muchos de forma repentina, debemos acudir al médico, aunque no reflejen ninguna enfermedad subyacente. Estos probablemente podrían ser angiomas de araña. También debemos consultar si un angioma empieza a sangrar, sentimos incomodidad o cambia su apariencia.

El principal motivo de la aparición de estas lesiones en la zona cutánea es el proceso de envejecimiento, por ello suelen desarrollarse a partir de los 40 años (por lo general, aumentan en número a medida que envejecemos). Además, estos problemas relacionados con los vasos frecuentemente se transmiten en las familias y por ello, el motivo genético es uno de los más destacados.

Se pueden diagnosticar con un examen visual y, por lo general, no requieren ningún tratamiento. Dicho esto, estas manchas se pueden eliminar de forma no invasiva si su apariencia molesta, normalmente por motivos estéticos. El médico puede recomendar una técnica de eliminación relativamente indolora que incluye láser o nitrógeno líquido.