Analistas Editorial. Por WCH

MALDITA CORRUPCIÓN

¿Pero quién es quizás el mayor responsable de la corrupción?, se pregunta el editorialista.

Domingo, 28 de Abril de 2024

"El poder es una droga. Quien lo haya probado al menos una vez queda envenenado para siempre."

WINSTON CHURCHILL

No hay sector del gobierno en el que no se descubra corrupción. El mayor trabajo que tiene Milei hoy es luchar contra cada kiosco que se encuentra en TODOS los estamentos gubernamentales: obra pública (se podría escribir un libro solo sobre eso), planes sociales, compras públicas (hasta de delantales), comedores comunitarios (comida de mala calidad y robos), empleados que cobran pero no trabajan (eso también es un robo), peajes para importaciones, pauta pública, películas, vacunas, aerolíneas, asesorías, consultorías, cobros de retornos por leyes o por la no salida de leyes, justicia, medicamentos, terrenos públicos, permisos, ahora seguros y mil más. Es imposible de nombrar.

El Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, en su discurso en Londres donde se desarrolló la Cumbre contra la Corrupción expresaría: "La corrupción equivale, simplemente, a robar a los pobres. Constituye un doble menoscabo del crecimiento y la prosperidad, en lo que se refiere no solo al desvío de recursos de sus fines previstos sino también a los efectos a largo plazo de los servicios que no se prestan: falta de vacunación, falta de suministro de útiles escolares, falta de construcción de caminos. En mis viajes por el mundo he visto el efecto corrosivo de la corrupción en la vida de los pobres, y el consiguiente deterioro pronunciado de la confianza de los ciudadanos en sus Gobiernos." Pero lo más importante, creo yo, lo diría como prioritario: "Primero, debemos seguir insistiendo en obtener más información y lograr más transparencia en cuanto a los fondos públicos".

Acá me detengo un momento. Esta semana hubo una masiva marcha donde, entre medio de frescos e idealistas jóvenes, apareció lo más corrupto de la política nacional. Sí, señores, con una total hipocresía, los que se sumaron a esta queja y aprovecharon el descontento, son los mismos que durante más de 40 años hemos acusado sin éxito de ser los principales responsables del robo. Pero lo más llamativo es que los jerarcas de las aulas estudiantiles, mientras exigían recursos, se negaban a lógicas auditorías que a cualquier funcionario público debería hacérsele. El defensor Yacobitti, de dudosa riqueza, arengaba la insensibilidad del gobierno, por supuesto, siempre acompañado del multimillonario Lousteau, cuya fortuna devino de sus consultorías, que esperemos no se hayan realizado a esas universidades que se niegan a mostrar en qué gastan su dinero, mientras heroicos profesores enseñan a jóvenes por sueldos casi miserables. Sí, señor, quizás los gastos de representación y demás de esas Universidades no son muy mostrables.

¿Pero quién es quizás el mayor responsable de la corrupción? Si tomamos el dato de que la mayoría de los casos de corrupción culminaron con su archivo (21 %) o el sobreseimiento (20 %) en la etapa de la investigación y que sólo el 2 % llegó a una sentencia de culpabilidad, tenemos que pensar en una justicia cómplice, en desmedro de una gran cantidad de honestos magistrados que día a día intentan llegar a la verdad rodeados de esta runfla.

En su discurso, Kim también expresaría: "debemos hacer más para lograr la participación de los ciudadanos y el sector privado. Si bien la información se está volviendo más accesible, es preocupante que en muchos casos se esté reduciendo el espacio para que los ciudadanos y las organizaciones no estatales expresen sus objeciones."

Simplemente control, el que los rectores hoy no quieren, sería bueno saber por qué.

Que la educación es la base de todo crecimiento está fuera de discusión, que se debería poner todos los esfuerzos necesarios en ello, es indiscutible. Pero también es cierto que hoy Argentina tiene hambre y eso significa que debemos extremar recursos, cuidarlos, controlarlos y priorizar el orden de urgencias. Quienes no entiendan esto, son simples egoístas insensibles a las carencias actuales. o simples protectores de una oscura administración. ¿Será el eterno Yacobitti uno de ellos?

La historia y sus rincones nos ha enseñado mucho y sus grandes pensadores, más aún, por eso las palabras de Churchill cuando expresa: "Los deseos solidarios y la buena voluntad no pueden superar a los datos crudos" son el mayor punto de esta lucha contra toda estupidez o picardía y ahí cuando el destino de todos depende de uno, es muy importante escuchar al más grande pensador político de la humanidad, diría Maquiavelo: "Esto es algo que merece ser notado e imitado por todo ciudadano que quiera aconsejar a su patria, pues en las deliberaciones en que está en juego la salvación de la patria, no se debe guardar ninguna consideración a lo justo o lo injusto, lo piadoso o lo cruel, lo laudable o lo vergonzoso, sino que, dejando de lado cualquier otro respeto, se ha de seguir aquel camino que salve la vida de la patria y mantenga su libertad". El objetivo por encima de las necesidades y la honradez patriótica por encima de la CORRUPCIÓN MALDITA, aunque a los ojos del gran público parezca un principio.

Quizás sea por ello que siguiendo los consejos de Nicolás, el presidente haya adoptado otra de las premisas de El príncipe: "Un príncipe, viéndose obligado a sabiendas a adoptar la bestia, tenía el deber de escoger el zorro y el león, porque el león no se puede defender contra las trampas y el zorro no se puede defender contra los lobos. Por lo tanto, es necesario ser un zorro para descubrir las trampas y un león para aterrorizar a los lobos."

Lobos que se visten de educados corderos. Si no hay nada que ocultar, ¿cuál es el problema de mostrar todo lo que corresponda y por lo cual están obligados? Esa sería la primera muestra de honestidad de los que hoy se quejan, y después sí, pelear por lo suyo, pero no olvidando que hoy la Patria está sufriendo necesidades y que una forma de ser un gran ciudadano es ser no solo educado sino también SOLIDARIO. La gran virtud de los exitosos países Nórdicos. ¿Será por eso?

Todos se han equivocado, pero quien lo hizo HONESTAMENTE, esta libre de culpas, para ello hay que poder mostrar las manos limpias.

Se entendió, PODER MOSTRAR...

Maldita corrupción que nos ha llevado a donde estamos. Maldita droga el poder.