El presidente Javier Milei encabezó el acto por el Día del Holocausto junto a los principales referentes de la comunidad judía y, en ese marco, reiteró su respaldo a Israel, al señalar que "tomar partido es una obligación moral".

"Tomar partido no es una opción entre otras, sino una obligación moral", sostuvo el Jefe de Estado, que consideró el Holocausto como "la tragedia más grande de la historia de la humanidad".

De esta manera el mandatario ratificó su apoyo a Israel y expresó que, mientras algunos países le "dan la espalda", otros como Argentina estarán  "al lado suyo, firme siempre".

"En tiempos de oscuridad, cuando levantar la voz es costoso y la mayoría, se tiene la obligación de hablar", evaluó el jefe de Estado, en el acto realizado en el ahora ex Centro Cultural Kirchner, renombrado próximamente Palacio Libertad.

Javier Milei y un mensaje en contra de la CGT previo al paro

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A través de su cuenta de X (ex Twitter), el Presidente lanzo un dardo hacia la central obrera. 

El Presidente cuestionó el "antisemitismo" y el "fanatismo islámico intolerable", y afirmó que ambos son "percibidos por el mundo libre con incomodidad y gestos ambiguos".

En este sentido señaló: "Miro a mi alrededor en los liderazgos del mundo libre, a grandes naciones y veo indiferencia en algunos y en otros miedo a pararse del lado de la verdad".

Además, recordó que "hoy en Gaza todavía hay más de 100 secuestrados, de los cuales 8 son argentinos".

"Cuando el mundo calla tenemos la obligación de hablar, no hacer la vista gorda. Aunque para algunos sea inconveniente, es la única forma de que la Shoá no se repita", enfatizó el Presidente, en el acto organizado por la DAIA y el Museo del Holocausto.

Y agregó: "Dios no va a aceptar justificación en su juicio único, no nos va a juzgar por lo que creíamos, sino por lo que hicimos. Denunciar el terrorismo islámico es una obligación".