"Presento esta renuncia con serenidad, sin renunciar al derecho de ejercer mi defensa en los ámbitos que correspondan, pero con la convicción profunda de que la credibilidad del sistema de justicia exige gestos firmes", indicó en el escrito.
Julieta Makintach, jueza del Tribunal Oral en lo Criminal N.º 2 de San Isidro, presentó este martes su renuncia al cargo, horas después de que el jurado de enjuiciamiento se declarara competente para iniciar un juicio político en su contra. El proceso está vinculado a la grabación de un documental no autorizado durante el juicio oral por la muerte de Diego Armando Maradona.
La dimisión, presentada ante la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires a través de su abogado, Darío Saldaño, no solo evita el avance del proceso disciplinario sino que también podría permitirle acceder a una jubilación de privilegio. En caso de haber sido condenada en el jury, la magistrada habría perdido ese beneficio y solo habría accedido a una jubilación ordinaria.
En el escrito entregado, Makintach justificó su decisión: "Presento esta renuncia con serenidad, sin renunciar al derecho de ejercer mi defensa en los ámbitos que correspondan, pero con la convicción profunda de que la credibilidad del sistema de justicia exige gestos firmes".
También reconoció la carga institucional del caso: "Consciente del contexto, y del daño que la prolongación de la situación actual podría generar a la confianza pública en el Poder Judicial, considero que en este momento mi mayor contribución a la reconstrucción del prestigio institucional y a la reparación de los errores cometidos es apartarme voluntariamente del cargo".
La Fiscalía Criminal y Correccional Nº1 de San Isidro investiga el accionar de la magistrada durante el debate oral.
La renuncia se precipitó luego de que el tribunal de enjuiciamiento resolviera avanzar con el proceso disciplinario por los hechos vinculados a la filmación del documental durante el juicio por la muerte de Maradona, lo que se considera una falta grave al reglamento judicial.
En una audiencia realizada en el anexo del Senado bonaerense, en La Plata, el jurado decidió suspender a Makintach -quien ya estaba licenciada por decisión de la Suprema Corte- y declarar su competencia para llevar adelante el jury. A partir de esa resolución comenzó a correr un plazo de cinco días para que la jueza respondiera la acusación y los denunciantes ratificaran sus presentaciones.
El cuerpo que resolvió avanzar con el proceso estuvo compuesto por los jueces Álvaro García Orsi y Pablo Agustín Grillo Ciocchini (La Plata), Fabián Ramón González (Morón), María Victoria Lorences y Mirta Daniela Greco (ambas de Lomas de Zamora). Los suplentes designados son Alberto Biglieri (Lomas de Zamora), Lisandro Benito (Junín) y Guillermo Andrés Marcos (Bahía Blanca).
Con su dimisión, Makintach pone fin a su carrera judicial envuelta en una controversia que dejó al descubierto fallas institucionales y abrió un debate sobre la ética en el ejercicio de la magistratura.