Luego del escándalo por la participación de la magistrada en un documental, los abogados de todos los involucrados avanzaron en su recusación.
Este martes se vivió un momento clave en el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona: la jueza Julieta Makintach fue apartada de la causa, luego del escándalo que desató la filtración de un documental grabado dentro de los tribunales y vinculado directamente al proceso judicial.
La audiencia se centró en el tratamiento de la recusación presentada contra Makintach, cuestionada por su presunta participación en la producción audiovisual que abordaría el juicio por la muerte del ídolo. Aunque la magistrada reconoció que "no fueron las mejores formas", aseguró que actuó con imparcialidad, que desconocía el contenido del guion y, en un primer momento, se resistió a ser apartada.
Pese a sus argumentos, tanto los abogados defensores de los imputados como los representantes de la familia Maradona coincidieron en pedir su alejamiento por considerar que su continuidad comprometía la transparencia del proceso.
El Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro consideró comprometida su imparcialidad; la magistrada aceptó la decisión.
Finalmente, el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro resolvió aceptar la recusación y apartar a Makintach de la causa. La jueza escuchó la resolución con evidente incomodidad, con la mano en el mentón y la mirada baja.
Tras la decisión, la audiencia fue suspendida por dos horas para definir los próximos pasos en la reconfiguración del tribunal.
Cabe recordar que la polémica se originó tras la difusión de imágenes y un tráiler del documental, que mostraban a Makintach colaborando con la filmación dentro del edificio judicial antes de que comenzara formalmente el juicio.
La separación de la jueza reconfigura el escenario del proceso judicial más importante en torno a la muerte del astro argentino, ocurrida el 25 de noviembre de 2020, en el que están imputados varios profesionales de la salud.