Gómez manifestó su preocupación por la decisión, señalando que el CEO cumple funciones estratégicas clave como la geolocalización de móviles policiales, la coordinación de recursos ante emergencias y la clasificación y derivación de llamadas, tareas que requieren un alto nivel de profesionalismo, formación técnica y capacidad de toma de decisiones bajo presión.

La legisladora también advirtió que la iniciativa refleja una crisis profunda dentro de la Policía de Mendoza, caracterizada por la falta de personal y una creciente desmotivación entre los efectivos. Actualmente, se estima que entre 30 y 50 policías se retiran mensualmente de la fuerza, no por jubilación, sino por desilusión con la carrera. Muchos de ellos, jóvenes de entre 25 y 30 años, abandonan la profesión para desempeñarse en otros rubros, como el comercio.

Entre las causas de esta situación, Gómez destacó los bajos salarios, las condiciones laborales exigentes y la imposibilidad de acceder a los plus salariales sin realizar jornadas laborales excesivas. A esto se suma, según la diputada, la falta de respuesta del Gobierno provincial ante los reclamos del personal policial y una postura oficial que niega la gravedad del problema.

La legisladora cuestionó también la idoneidad del perfil de los aspirantes convocados y pidió precisiones sobre los criterios de selección, el contenido de la capacitación, las funciones específicas que se les asignarán y los mecanismos para garantizar la imparcialidad en el proceso de ingreso. En ese sentido, alertó sobre la posibilidad de que la convocatoria se utilice con fines proselitistas en el marco de una estrategia electoral.

Finalmente, Gómez sugirió que una posible alternativa para paliar la falta de personal en el CEO sería convocar a personal policial retirado con experiencia, formación y conocimiento institucional, en lugar de recurrir a estudiantes sin preparación específica en seguridad pública.