El mercado latinoamericano de vehículos eléctricos experimenta un crecimiento sin precedentes, consolidándose como una de las regiones con mayor potencial en el mundo para la movilidad eléctrica.
A finales de 2024, la cantidad de vehículos eléctricos livianos en América Latina y el Caribe alcanzó las 444,071 unidades, lo que representa un impresionante aumento del 187% en comparación con el cierre de 2023. Este crecimiento triplicó el parque automotor eléctrico en la región en tan solo un año, evidenciando una aceleración significativa en la adopción de esta tecnología. El aumento se debe principalmente a un incremento del 78% en la integración de vehículos eléctricos durante la segunda mitad del año en comparación con la primera.
Brasil y México se han consolidado como los principales mercados de la región, destacando no solo en ventas sino también en el desarrollo de infraestructura de carga pública. Brasil pasó de tener 1,876 estaciones de carga en 2023 a 12,700 a finales de 2024, mientras que México incrementó de 1,340 a 3,212 en el mismo período. Ambos países representan aproximadamente el 86% de la infraestructura de carga disponible en toda la región latinoamericana.
El mercado latinoamericano de vehículos eléctricos alcanzó un valor de 46,060 millones de dólares en 2024, y se proyecta que llegue a 319,140 millones de dólares para 2033, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 22,46%. Colombia destaca en el primer trimestre de 2025, casi cuadruplicando sus ventas de automóviles eléctricos de batería, mientras que Uruguay también muestra un crecimiento significativo.
A pesar del entusiasmo y el crecimiento, persisten importantes desafíos para la masificación de los vehículos eléctricos en la región. El precio sigue siendo un factor limitante, quedando fuera del alcance de muchas personas en América Latina. El CEO de Toyota, Masahiro Inoue, señaló que la falta de políticas gubernamentales claras sobre descarbonización del transporte es parte de la razón de la adopción relativamente lenta, proyectando que los vehículos eléctricos solo representarán alrededor del 5% del mercado total de la región para 2030.
Los fabricantes chinos de vehículos eléctricos están apostando fuertemente por Latinoamérica como un mercado clave para su expansión. BYD planea vender 50,000 vehículos eléctricos en México en 2024 y duplicar esa cifra hasta 100,000 en 2025, además de estar próximo a anunciar la ubicación de su primera planta de fabricación en ese país. Estos movimientos estratégicos por parte de fabricantes globales sugieren que el mercado latinoamericano seguirá experimentando un fuerte crecimiento en los próximos años.