Mendoza es un horno: "Medio millón de personas al año, mueren producto del calor"
Así lo reveló el doctor Mario Ríos, quien brindó una serie de tips para prevenirlos.
Miercoles, 15 de Enero de 2025
La ola de calor esta semana hizo que Mendoza sea un verdadero infierno y generó que muchos extremaran sus cuidados personales para evitar los golpes de calor. Es por eso que en una entrevista en el programa La Verdad al Aire, emitido por MNews Radio y El Observador Mendoza 106.1, el doctor Mario Ríos brindó una serie de tips para prevenirlos.
El golpe de calor ocurre cuando el cuerpo pierde la capacidad de regular su temperatura debido a la exposición prolongada a altas temperaturas o a la deshidratación. Puede afectar a cualquier persona, pero los extremos de la vida (bebés y adultos mayores) son los más vulnerables.
"Los adultos mayores, por el envejecimiento natural del cerebro, empiezan a tener fallas en el centro de termo regulación. Es decir, aunque su cuerpo sufra las altas temperaturas, ellos no lo sienten.", explicó. Es por eso que enfatizó en la importancia de cuidarlos en estas épocas.
Síntomas del golpe de calor
Letargia y cansancio extremo.
Sudoración excesiva seguida de piel seca (en casos avanzados).
Dolores de cabeza y vómitos.
Aumento de la temperatura corporal.
En adultos mayores, síntomas como decaimiento o apatía pueden pasar desapercibidos, ya que suelen no manifestar sensación de calor ni sed.
Prevención
Hidratación constante: Se recomienda consumir al menos 3 litros de líquidos al día. De estos, al menos 1.5 litros deben ser agua pura, complementada con alimentos ricos en agua como frutas y verduras.
Evitar el alcohol: Las bebidas alcohólicas deshidratan aún más el cuerpo.
Ropa adecuada: Usar ropa liviana y de colores claros que permita la transpiración.
Refrescar el cuerpo: Duchas con agua tibia o fresca ayudan a regular la temperatura corporal. En caso de dificultad para bañar a una persona, se pueden utilizar paños húmedos en axilas, ingle, palmas y pies.
Evitar la exposición al calor extremo: Especialmente en las horas pico del día (10:00 a 16:00).
Estar atentos a los vulnerables: Vigilar a los adultos mayores y niños pequeños, quienes pueden no expresar síntomas evidentes.