Nuevamente se préstamos un  escándalo judicial, que muestra ribetes de una trama de acuerdos entre funcionarios  y empresarios. el fiscal Ticheli, por orden del fiscal Alejandro Iturbide, en la causa P17.924/23.

Además, la medida se extendió al director general Juan Rodríguez. la decisión tiene características que hace dudar de la seriedad de esta. 

Es que el fiscal Iturbide cita en la resolución que ordena a Ticheli a imputar, las declaraciones de Juan Rodríguez. para ello transcribe la misma en forma parcial,  lo hace en la parte que Rodríguez aclara que la salida de Fecovita de Evisa (la sociedad que habían formado con Iberte) fue de común acuerdo.

También el retiro del inmueble donde asienta la bodega Resero que había aportado Fecovita. pero luego insólitamente, sin tener en cuenta esa declaración, el fiscal Iturbide dice que el engaño estuvo en que fecovita nunca pensó en escriturar el inmueble a Iberte.

No es necesario tener conocimientos jurídicos para advertir no puede haber engaño cuando las dos parte estuvieron de acuerdo en separarse de la sociedad.  Acá es importante aclarar que en esa causa el fiscal anterior, Damore, había ordenado el archivo justamente porque no veía delito alguno. Luego Ticheli pide el desarchivo e instruye un peritaje contable. pero llamativamente el  fiscal Iturbide, jefe de Ticheli, al ordenarle el procesamiento no cita el estudio contable.

Esto seria por una simple razón: no encontró pruebas que incriminen a los imputados. Por último, omite considerar en las declaraciones de Rodríguez, (que transcribe), toda la deuda que dejaron de pagarle a Fecovita los vendedores que seleccionó Iberte.

Tampoco  que  Retamero y García están imputados en Buenos Aires por quedarse con la mercadería de Fecovita y venderla sin rendir la plata, pese a que Rodríguez lo dice. Además no tiene en cuenta, no obstante, que está aportado como prueba en el expediente, que Iberte es una empresa fantasma con problemas para probar la tenencia del dinero que ingresó a Argentina.

En síntesis la balanza se inclinó solo para un lado. del fiscal Ticheli, el tema no nos llama la atención. ya hemos hablado de su doble vara en el caso del múltiple imputado por estafa Carlos Erreguerena, quien con una condena en suspenso anterior lo mantiene libre en las causas p 84.199;87259 y 91485, mientras que Aancho, Irañeta, Panella y Rodríguez, personas de conductas intachables, son imputados sin pruebas serias. Hoy se suma en nuestro estupor el fiscal Iturbide. Todo esto es algo más del sainete al que nos tiene acostumbrado la Justicia de Mendoza.