La solicitud fue realizada por uno de los fiscales que lleva adelante la investigación, Mariano de Guzmán. La medida se dio luego de que el “chofer” Agustín Ybarra declarara como testigo ante la jueza Cristina Pozzer Penzo.
Este jueves la Justicia ordenó hacer un entrecruzamiento de llamadas entre Laudelina, su hija Macarena, el abogado José Codazzi y el senador provincial Diego Pellegrini. Lo solicitud fue realizada por uno de los fiscales de la causa Loan, Mariano de Guzmán.
Codazzi, a quien le secuestraron sus dos teléfonos, fue quien llevó a declarar a Laudelina y Macarena en Corrientes para instalar la versión del accidente, a los pocos días de la desaparición del nene de 5 años.
El entrecruzamiento se dio luego de que Agustín Ybarra -chofer de Laudelina-, se sentara ante la jueza Cristina Pozzer Penzo y declarara como testigo. Allí señaló que el día que trasladaron a Laudelina y a su hija Macarena, también vio a Codazzi y Pellegrini.
Según contó Ybarra, es amigo de Pellegrini desde hace muchos años y señaló que el 28 de junio viajó con él hacia la localidad de Esquina para pagarles a unos albañiles, momento en el que se cruzaron con Codazzi, con quién jugó al paddle en algunas oportunidades e incluso son vecinos.
Sobre el encuentro con Laudelina y Macarena, señaló: “Me ofrecí a acompañarlo (a Codazzi a la casa de Laudelina). Mi idea era que iba a ver a su cliente, no estaba consciente de que nos íbamos a llevarla (a declarar)”. De hecho, fue el propio Pellegrini quien les prestó su auto a ambos para que fueran a buscar a Laudelina y a Macarena, ya que el vehículo de Codazzi estaba en el lavadero, de acuerdo a lo que detalló en el documento.
“Nos fuimos hasta ahí -casa de Laudelina-, llegamos a la localidad Desmochado y ahí nos esperaba Pellegrini, en la estación de servicio para cambiar de vehículo e ir hacia Corrientes capital, en un viaje que duró alrededor de tres horas y media”, según relató el testigo ante Pozzer Penzo.
Luego del cambio de autos, se subieron al del abogado: “En la camioneta Codazzi manejaba, yo de acompañante, ahí supe el nombre de la señora, se llamaba Laudelina, y de la hija supe el nombre después, se llamaba Macarena. Ahí nos fuimos hasta Corrientes. Un viaje normal, común, nos íbamos hablando de nuestros padres, atrás yo escuchaba que la señora hablaba con la hija, la que más se escuchaba era la hija, comentaban sobre el accidente”, detalló sobre el traslado, aunque dijo que no sabía puntualmente a qué se referían y le restó importancia, ya que no las conocía.
De la misma manera, siguió: “Llegamos a Corrientes, José me dijo que ellos tenían cosas que hacer, entonces le dije que no tenía problema, que me bajaba en cualquier lugar y tomaba un remís. En la avenida Centenario me tomé uno y me fui a mi casa. Eso fue más o menos 23:30, yo estaba cansado, inclusive en el viaje dormí unos 10 o 15 minutos. En ningún momento escuché que se le hiciera algún ofrecimiento”.
Ybarra aseguró que delante de él en ningún momento hablaron sobre una supuesta oferta de dinero y viviendas. “Supe después lo que difundieron los medios, delante de mí jamás”, declaró, y remarcó: “Del ofrecimiento de dinero nunca escuché. Lo que escuché que la chica le dijo a la madre ´no te olvides de decirle- supongo que cuando declaraba- que la camioneta cuando frenó prendió la luz de atrás´. Eso me acuerdo patente”.
El hombre, que trabaja en la administración de la Municipalidad de Corrientes y tiene una pyme donde hace limpieza de caminos vecinales, indicó que tanto Laudelina como Macarena iban en el auto “de la mejor manera, sintiéndose protegidas por su abogado, yo percibía eso”.
Asimismo, manifestó que se enteró que Laudelina lo mencionó en la indagatoria cuando sus amigos le empezaron a mandar mensajes porque lo habían visto en la televisión: “Me ponían en un papel que nunca fui, me sentía mal por mi familia”. Fuente: TN