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Cámaras motorizadas en smartphones: de innovación a obsolescencia por tendencias del mercado.

Los fabricantes de "smartphones" empezaron a hacer pantallas más grandes..

Miercoles, 1 de Octubre de 2025
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Antes de la pandemia de coronavirus, los fabricantes de teléfonos inteligentes buscaban maximizar el espacio de la pantalla aumentando los tamaños de visualización y minimizando los biseles. Esta tendencia de diseño condujo a soluciones innovadoras para alojar la cámara frontal mientras se preservaba el espacio de la pantalla.

Las cámaras motorizadas ganaron popularidad en 2018 y 2019, presentando mecanismos retráctiles, giratorios e incluso desmontables tanto para las cámaras delantera como trasera.

Algunos ejemplos incluyen el Vivo NEX (2018), que utilizaba un pequeño módulo retráctil para la cámara frontal. El OPPO Reno (2019) presentaba una cámara frontal retráctil "con forma de aleta", mientras que el OPPO Find X (2018) tenía un módulo emergente que revelaba tanto las cámaras delantera como trasera.

El Galaxy A80 de Samsung (2018) empleaba un módulo de cámara giratorio que se extendía y volteaba para servir como cámara frontal. Motorola también adoptó esta tendencia con un sistema de periscopio para la cámara frontal de su Motorola One Hyper (2019).

Asus adoptó un enfoque diferente con sus Zenfone 6 (2019), Zenfone 7 (2020) y Zenfone 8 Flip (2021), utilizando un módulo abatible motorizado que actuaba como cámara trasera y frontal.

Vivo exploró diseños más innovadores, mostrando un sistema en 2020 que combinaba una cámara frontal retráctil con la capacidad de separarla para uso independiente e incluso controlarla mediante comandos de voz.

Las cámaras motorizadas finalmente se desvanecieron con la llegada de las cámaras en pantalla, que se han convertido en la tendencia de diseño dominante, maximizando el espacio de la pantalla al tiempo que incorporan un pequeño recorte para la lente.

Según Antonio Torregrosa, Technical PR & Phone en Asus, las cámaras motorizadas permitieron a los usuarios capturar selfies con la misma calidad y capacidades que la cámara trasera, accediendo a lentes avanzadas como gran angular o zoom, normalmente reservadas para la parte trasera.

Asus fue un importante defensor de las cámaras motorizadas, junto con OPPO. Torregrosa explicó que Asus las adoptó en sus Zenfones por su "experiencia visual de pantalla completa" y versatilidad fotográfica, lo que fue recibido de forma "muy positiva", particularmente entre los entusiastas de la fotografía móvil y los usuarios de redes sociales.

Sin embargo, sus altos costes de fabricación, limitaciones de diseño e impacto en la durabilidad del dispositivo las hicieron insostenibles. Su activación también fue más lenta que simplemente abrir la aplicación de la cámara. En última instancia, las tendencias del mercado se desplazaron hacia soluciones menos complejas, lo que llevó a la disminución de las cámaras motorizadas.