Un hombre apareció muerto tras un incendio en un depósito que funciona como imprenta en el barrio porteño de Boedo. Luego de apagar el fuego, los bomberos descubrieron el cuerpo de un empleado con un disparo en la cabeza.

La víctima fue identificada como Eduardo Moguilevsky, de 54 años, un hombre que -de acuerdo con fuentes de la Ciudad- estaba denunciado por abuso sexual. Los agentes policiales detallaron que tenía el "cráneo destrozado".