El periodista Nicolás Wiñaski dio a conocer en exclusiva en ¿La Ves? (TN) la declaración de Carlos Pérez, el exnavío y uno de los detenidos más complicados en la causa por la desaparición de Loan. 

"Nosotros no tomamos conocimiento de que el niño estaba perdido en ese momento. Para nosotros era una situación donde ellos iban hacia el encuentro de un niño que se desplazaba y que le habían avisado para que lo espere porque o querían confirmar que había llegado o no. Chau chau, nos fuimos", dijo la primera parte de la declaración. 

Asimismo, relató: "Después mi esposa recibe un llamado telefónico de la abuela Catalina, donde le comenta que el chico en realidad todavía no lo podían encontrar. Ahí le pide que revisen la camioneta, si eventualmente no se había escondido, travesura de chico que se podría haber escondido la camioneta porque era uno de los dos vehículos que estaban en ese playón de estacionamiento, los únicos dos que estaban ahí".

"Fuimos hasta el vehículo. Yo le digo "mirá no vale la pena ir". Vamos, pero yo le pongo llave siempre en forma automática y trabo. La camioneta mía tiene cúpula y le trabo todas las ventanas que tiene al costado y las dobles trabas que tiene arriba porque se levanta una parte también con llave. Pero le digo, vamos por las dudas que me haya olvidado poner llave. Bueno, vamos a verificar. Por supuesto no estaba en la camioneta. Mi mujer se tiró para ver abajo si estaba. No sea medio raro que estuviera abajo de la camioneta, pero de todas maneras ella revisó abajo, por las dudas también. Bueno, por supuesto, el chico no estaba. Y eran las cuatro de la tarde aproximadamente", precisó.

"Normalmente los partidos empezaban a las tres. Cuatro menos cuarto termina. Y ahí, quince minutos y a las cuatro empieza. Bueno, justo en ese momento vuelve la luz. Pero no nos quedamos. Le digo, vamos. Prioritario ir a buscar al chico. Así que, bueno, ahí emprendimos el regreso. Pero fuimos de manera más lenta en el camino. Porque justamente... Sobre todo ya en las proximidades de la casa de Catalina, mirando a los costados por si lo veíamos caminando", detalló. 

Y puntualizó: "De hecho, a un kilómetro más o menos de la casa de Catalina hay una escuela abandonada. Y en ese lugar ya encontramos a los familiares que andaban dispersos por el campo buscando. Bueno, ahí mi mujer se unió a la tía. En la búsqueda, a pie, por otro sector. Y yo seguí en la camioneta. Subí uno de los chiquitos que estaba ahí, del lado del acompañante. Y bueno, íbamos los dos a paso de hombre. Yo siguiendo a mi esposa que iba por el lateral a la derecha".