Los principales contribuyentes del Partido Demócrata están cada vez más "preocupados" por la candidatura del actual mandatario a las próximas elecciones, señala The New York Times.
El lamentable desempeño de Joe Biden en el debate presidencial aún sigue repercutiendo en el Partido Demócrata. Los principales donantes de Wall Street están cada vez más "preocupados" por la candidatura del mandatario a las próximas elecciones estadounidenses y están discutiendo cuándo sería el mejor momento para que se retire de la carrera electoral, recoge The New York Times.
Un grupo de importantes financieros e inversores, incluidos Larry Fink de BlackRock, Jon Gray de Blackstone, Peter Orszag de Lazard y Robert Wolf, un exejecutivo cercano a Barack Obama, están discutiendo si "seguir con Biden", según fuentes con conocimiento de la cuestión citadas por el periódico.
Un director ejecutivo anónimo sugirió que es "inevitable" que el presidente, de 81 años, se haga a un lado, describiendo la situación como una cuestión de tiempo. En ese contexto, el grupo está barajando distintos escenarios de cara a las siguientes semanas.
Algunos donantes hablaron sobre formas "elegantes" para que Biden se haga a un lado y conserve su reputación. Otros ejecutivos consultados argumentaron que sería un error si renuncia sin convertirse primero en candidato en la convención demócrata a realizarse en agosto en Chicago, ya que "le quitaría el poder de designar a su reemplazo".
Además, una convención abierta en la que los delegados no estén vinculados a ningún candidato en particular podría generar un conflicto interno, lo que ayudaría al candidato republicano, Donald Trump, a ganar las elecciones, destacaron las fuentes.
Otros donantes sostuvieron al medio que sería complicado para el presidente estadounidense dar un paso al costado antes de la cumbre de la OTAN que se celebrará en Washington esta semana.
Por otra parte, hay un sector que piensa que Biden debe retirarse lo más pronto posible para que el espacio político tenga tiempo a realizar una "miniprimaria", lo que otorgaría más legitimidad a quien resulte nominado.
Sin embargo, el actual mandatario estadounidense y sus aliados han resistido la presión para que renuncie a la candidatura. Entre las razones, señala el periódico, están las pocas posibilidades de que algunos de los principales donantes cierren sus billeteras, dado su profunda oposición a Trump.
Biden se considera el mejor candidato demócrata y no tiene intención de retirarse de la carrera presidencial en contra de la opinión de las élites. "La conclusión es que no nos vamos a ninguna parte. Yo no me voy a ninguna parte. No me presentaría si no creyera absolutamente que soy el mejor candidato para vencer a Donald Trump en 2024", afirmó en una entrevista reciente con la cadena MSNBC.
Asimismo, advirtió a las élites del Partido Demócrata que buscan su remplazo. "Me siento muy frustrado por las élites, [.] por las élites del partido que "saben mucho más". Si alguno de ellos cree que no debo presentarme, que se presente contra mí. Adelante, desafíenme en la convención", avisó Biden.