Una importante universidad latinoamericana advirtió sobre el uso adecuado de este producto y dejó en claro cuál es la manera ecológica de deshacerse de los residuos de estas características
El papel higiénico es un elemento esencial en nuestra rutina diaria de limpieza. Sin embargo, muchas personas se preguntan cuál es la manera adecuada de desecharlo: ¿debería tirarse en el inodoro o en un tacho de basura? Según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la respuesta tiene importantes implicaciones para la higiene y el medio ambiente.
El papel higiénico se fabrica a partir de pulpa de celulosa obtenida de la madera de árboles, principalmente pinos. A menudo, se le añaden sustancias como Aloe Vera para mejorar sus propiedades, además de algodón y cáñamo para incrementar su suavidad. Este papel está diseñado para ser delgado, resistente y “ecoamigable”, capaz de descomponerse fácilmente en el agua.
Los expertos de la UNAM sugieren desechar el papel higiénico en el inodoro por varias razones clave. En primer lugar, esta práctica previene la acumulación de residuos en el baño, que puede ser un caldo de cultivo para microorganismos perjudiciales para la salud, como la bacteria Escherichia coli. Además, cuando se tira en el inodoro, el papel higiénico se desintegra gradualmente en el sistema de drenaje, gracias a su diseño específico para disolverse en agua.
El análisis de Profeco demostró que la mayoría de los tipos de papel higiénico actuales están diseñados para descomponerse en cuestión de días. Así, aproximadamente el 95% del papel se disuelve por completo en el agua, mientras que el 5% restante es tratado en instalaciones de aguas residuales, reduciendo significativamente el impacto ambiental.
Por otro lado, desechar el papel higiénico en un tacho de basura tiene consecuencias negativas para el medio ambiente. Los residuos que terminan en los vertederos contribuyen a la producción de gas metano, un potente gas de efecto invernadero. Además, la acumulación de papel usado en el baño puede generar malos olores y aumentar el uso de bolsas de plástico, que también son perjudiciales para el entorno.
Es importante tener en cuenta que tirar grandes cantidades de papel higiénico al inodoro puede obstruir las tuberías, por lo que se recomienda hacerlo con moderación. En algunos países, el uso del bidet se ha popularizado como una alternativa más ecológica, ya que reduce el consumo de papel higiénico. Sin embargo, para quienes siguen utilizando papel, desecharlo en el inodoro es la mejor práctica.
La correcta disposición del papel higiénico es crucial tanto para mantener la higiene en el hogar como para proteger el medio ambiente. Siguiendo las recomendaciones de la UNAM y otros expertos, tirar el papel higiénico en el inodoro resulta ser la opción más higiénica y sostenible. Así, no solo evitamos la proliferación de bacterias y malos olores, sino que también contribuimos a reducir el impacto ambiental de nuestros residuos diarios.