La hija de Jorge Rial solicitó a través de su abogado la prisión domiciliaria pero le fue denegada.
Morena Rial continúa detenida en la Unidad Penal N°51 de Magdalena, tras la revocación de la excarcelación que le había sido concedida en febrero pasado. La medida se da en el marco de una causa por robo agravado por efracción y escalamiento, delito que contempla penas de entre tres y diez años de prisión.
La hija del conductor Jorge Rial fue arrestada el 29 de septiembre y trasladada al penal bonaerense, donde permanece aislada en la zona de "buzones", separada del resto de las reclusas, mientras se define su situación procesal.
A poco de su detención, sus abogados Alejandro Cipolla y su equipo presentaron un pedido de prisión domiciliaria, argumentando que Morena es madre de un niño pequeño y que su situación judicial aún no está resuelta, ya que no cuenta con prisión preventiva firme.
"El gran beneficio era la excarcelación. Ahora se revocó, y lo que pedimos no es un privilegio, sino reemplazar la detención en el penal por una detención en su casa, con tobillera electrónica", explicó Cipolla en declaraciones al programa Mujeres Argentinas.
El letrado agregó que la solicitud se presentó con la expectativa de que la joven pudiera compartir el primer cumpleaños de su hijo Amadeo, que se celebra el 6 de octubre.
Sin embargo, el trámite judicial no avanzó con la rapidez esperada. Según informó el propio Cipolla, la verificación de los domicilios propuestos por la defensa aún no fue realizada por el Servicio Penitenciario Bonaerense, requisito indispensable para otorgar la prisión domiciliaria.
"Tuvimos una complicación con el tema de los domicilios. Propusimos dos lugares y tienen que supervisarlos. Hay que ver si el servicio penitenciario puede hacerlo este martes", señaló el abogado, quien confía en que la resolución podría conocerse el jueves 9 de octubre.
Hasta entonces, Morena Rial deberá continuar detenida en la Unidad 51. Como medida excepcional, la Justicia le permitió mantener comunicación con su hijo para celebrar su primer cumpleaños, mientras aguarda la decisión final sobre su pedido.