El porteño fue aplaudido por todo el estadio, le agradeció a la gente y recibió un reconocimiento luego de perder ante Gael Monfils (45°) por 6-7 (2), 6-2, 6-2 y 6-1
El resultado fue lo de menos. Pese a la derrota, lo más importante resultó el homenaje que recibió Diego Schwartzman (246º) en su despedida de los Grand Slams en el US Open, que este lunes arrancó su actividad.
En una Grandstand repleta que celebró cada uno de sus puntos, el Peque perdió ante el francés Gael Monfils (45°) por 6-7 (2), 6-2, 6-2 y 6-1. Luego del encuentro recibió el aplauso de los 8.100 espectadores que presenciaron el último baile en un Major del tenista argentino.
"Es difícil hablar, soy alguien que llora mucho. Una vez más jugando acá. Once veces. Lo hice muy bien. Toda la multitud hoy, los años anteriores, toda la gente latinoamericana, toda la gente estadounidense, no sé por qué me apoyan tanto", exclamó con cierta confusión acerca de los elogios del público.
Además, agregó: "No sé por qué me cuidan tan bien todos los años. No estoy seguro de si lo merezco o no. Pero estoy realmente agradecido. Quiero darles las gracias una vez más a todas las personas aquí y a quienes están viendo por televisión".
Finalmente, entre lágrimas, Schwartzman concluyó: "Nunca soñé con este tipo de momentos. Corrí tanto y tal vez lo merezco ahora. Estoy feliz de tener estos momentos. Felicidades a Gael una vez más y a su equipo. Voy a disfrutar cada momento de ahora en adelante. Quiero decirles gracias".
Desde 2014, dijo presente en todas las ediciones del US Open. En aquel año, perdió ante el serbio Novak Djokovic (Nº2) en la primera ronda. A su vez, lo más lejos que llegó el tenista argentino de 32 años fue en 2017 y 2019, en los que cayó eliminado en cuartos de final. En cuanto al ranking ATP, supo posicionarse como el número ocho del mundo en 2020 y en majors, sumó un total de 59 triunfos, siendo superado solamente por Guillermo Vilas, David Nalbandian y Juan Martín Del Potro.
El defensor central, que llegaba de Rosario Central, ahora deberá ser intervenido quirúrgicamente y estará un buen tiempo sin jugar al fútbol.